"Employee branding" se refiere a la práctica de utilizar a los empleados como embajadores de la marca y actores clave en la comunicación y el posicionamiento de la marca del empleador.
A diferencia del "employer branding" tradicional, que se centra en la presentación externa de una empresa como empleador atractivo, el "employee branding" se concentra en implicar activamente a los empleados en el proceso de construcción y comunicación de la marca.
El "employee branding" implica reforzar la lealtad, la motivación y la identificación de los empleados con la marca corporativa para convertirlos en auténticos embajadores de la empresa.
Esto se consigue fomentando una experiencia positiva de los empleados, desarrollando una cultura corporativa fuerte, reconociendo y recompensando el rendimiento sobresaliente y proporcionando formación y recursos para apoyar a los empleados en su papel de embajadores de la marca.
Al hacer que los empleados participen activamente en la creación de la marca y compartan con autenticidad sus experiencias positivas y los valores de la organización, la creación de la marca entre los empleados contribuye a reforzar la imagen y la reputación de la empresa como empleador atractivo, a aumentar el compromiso de los empleados y a atraer a posibles candidatos.